Imagina un bizcocho tan esponjoso y ligero que se deshace en tu boca como si estuvieras probando una delicada nube. Ahora, agrégale el sabor irresistible de la Nutella... Sí, esa irresistible crema de chocolate y avellanas, y dime que no te apetece... ¡Es imposible porque es la mejor combinación del mundo!
Este bizcocho nube de Nutella parte del famoso bizcocho japonés castella o kastuera que, en realidad, tiene origen español. Cuenta una leyenda que a finales del siglo XVI un barco de monjes portugueses encalló en la costa de Nagasaki y, en agradecimiento a los lugareños por su ayuda, les ofrecieron este bizcocho que llevaban a bordo. El término "castella" viene de Castilla.
Y, sin más, os cuento cómo prepararlo a continuación...