Smoothie bowl

¿Habéis sobrevivido al primer asalto navideño? Después de las comilonas de Nochebuena y Navidad, este smoothie bowl es ideal para rebajar calorías, desintoxicar un poco el cuerpo y darle una tregua antes de continuar el combate. Y es que todavía nos queda Fin de Año, Año Nuevo y Reyes, ¡un no parar!

Para que nuestro smoothie bowl sea perfecto, un truco es que la fruta (plátano, manzana y cerezas) esté congelada previamente. Eso, unido a una base de copos de avena, es lo que le proporcionará una base suficientemente sólida como para soportar el peso de los toppings elegidos. Además, en lugar de utilizar leche, ya sea vegetal o de vaca, he optado por utilizar yogur para beber desnatado.

Como toppings, he utilizado un poco de muesli, semillas de amapola y granada. ¡Tenéis que probarlo! La receta no tiene ninguna complicación, y es una opción muy sana como desayuno o merienda...

¡Vamos allá!

SMOOTHIE BOWL

Ingredientes

(Para 4 smoothies)

250 gr. de yogur líquido desnatado edulcorado

2 plátanos

2 manzanas

200 gr. de frambuesas

50 gr. de copos de avena

Toppings: granada, cereales, semillas...

Elaboración

1. La noche anterior o un par de horas antes, pelamos y troceamos las manzanas, los plátanos y las frambuesas y los metemos en el congelador. 

2. A la hora de tomar el smoothie, ponemos todos los ingredientes (salvo los toppings) en el vaso de la batidora y trituramos bien. Si observamos que a la batidora le cuesta procesarlo, es mejor que lo hagamos en dos o tres tandas.

3. Servimos en boles individuales y cubrimos con los toppings elegidos (en mi caso, granada, cereales y semillas de amapola).

Y hasta aquí mi oferta light para compensar los excesos navideños... Pero no os confiéis que la próxima receta será algo más calórica... :)

¡Nos vemos en 2018! ¡Feliz Año Nuevo!

Un beso,

Eva

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